La reforma previsional aprobada en diciembre pasado, pese a la ostensible oposición de gran parte de la sociedad, trajo como consecuencia el recorte de las jubilaciones, incluidas las de quienes accedieron a ese beneficio como investigadores con dedicación exclusiva.

Pechera AdIUNSa
El recorte jubilatorio afecta a los investigadores y científicos

El aumento anunciado por ANSES para el próximo mes de marzo es del 5,71% (tal como lo adelantaron los sectores que se opusieron a la norma) y ese será el porcentaje de actualización también para quienes se jubilaron como docentes e investigadores con dedicación exclusiva.Esos docentes tienen un régimen establecido por la ley 22.929 y deberían cobrar el 85% del sueldo correspondiente al cargo que tenía al momento de jubilarse; sin embargo, esa proporción se achicará en marzo y puede seguir achicándose en la medida en que su ajuste se realizará por la inflación y no por la evolución de los salarios.

En cambio, quienes accedieron al beneficio gracias a la ley de 24.016 (régimen para docentes nacionales), tendrán una mejora del 11,6%, los que se enmarcaron en la ley 26.508 (docentes universitarios sin 15 años de investigación o sin dedicación exclusiva) recibirán un 13,4% más y los trabajadores jubilados de Luz y Fuerza verán un incremento del 13,54%.

Quedan aquí en evidencia dos aspectos de la política actual: el desinterés por la ciencia y la investigación (o quizás por la ciencia y la investigación autónoma y soberana), y la magnitud del recorte operado sobre las jubilaciones a partir de la Reforma Previsional. Esto último queda palmariamente demostrado al ver los porcentajes de aumento que corresponden a los regímenes especiales, vinculados a los aumentos salariales, y cuyos porcentajes no tuvieron grandes diferencias con las del resto de los jubilados durante la vigencia de la ley anterior.

Más información: ANCLA, blog Jubilación-Docente.